«Esta mañana, la luz es el placer ». Stanislas Cazeneuve (Francia)
* Curvas de luz. Al atardecer, el río desciende sobre la noche. Poco a poco, la mirada, que se va con él, ya no sabe más que penetrar en el corazón. Contrario al río, el pensamiento retoma esta mirada otra vez. Allá donde huye el sentido, piensa como la noche. Piensa libre en el espacio de los incomprendidos, libre en la pasividad del sufrimiento. La debilidad de mármol sumada a la realidad. Hasta el retorno de toda certeza. * El sueño desata su mirada. Pasando el agua de la tierra, él quiere la verdad, el rostro, la vida. Pasando también los lapsos de intuición, los grados del gozo, la inquietud, él mismo, el sueño – y lo que él busca-, raudo para convertirse en realidad, Quiere responder a aquello que no tiene lugar de ser y que se sostiene allá. Como un sueño de sueño. Como termina la vida. Sin voz. Sin figura. * La casa se vacía de su noche. Reposa el espacio de lo desconocido, la frontera del día y de sí mismo. Oscila todo lo que se deja en apaciguamiento, el agotamien